Espinacas, una verdura con una alta densidad nutricional
Famosas por dar superpoderes al mítico personaje de dibujos animados Popeye, las espinacas son un alimento con una alta densidad nutricional, ya que aportan una gran cantidad de vitaminas, minerales y fibra en muy pocas calorías.
Espinacas ecológicas
Las espinacas son unas hojas verdes muy saludables y nutritivas, ricas en fibra y en vitaminas, como la A, la C, y en minerales, como el hierro.
Origen
Procedentes de Cataluña, puedes encontrar espinacas frescas y ecológicas a granel en todas nuestras tiendas durante los meses de octubre a mayo, siendo su momento óptimo de febrero a abril.
Destacan por su contenido en compuestos antioxidantes como las vitaminas C y E, los β-carotenos y la luteína, que protegen a las células del daño oxidativo.
Son ricas en hierro no hemo, un tipo de hierro que procede del mundo vegetal. Aunque este se absorbe peor, el contenido en vitamina C que tienen las espinacas mejora su biodisponibilidad.
Favorecen el tránsito intestinal gracias a la gran cantidad de fibra que contienen. De esta forma, también ayudan a atenuar la sensación de saciedad y enlentecen el vaciado gástrico.
Nutrientes principales (100 g de producto)
Vitamina C: 30 mg
Vitamina A: 542 μg
Fibra: 6,3 g
Proteínas: 2,6 g
Diferencias entre ecológico y no ecológico
Las espinacas ecológicas contienen menores niveles de nitratos en sus hojas porque en la agricultura ecológica está prohibido el uso de pesticidas y fertilizantes de síntesis química.
Además, son más nutritivas porque contienen más materia seca y menos agua, concentrándose más algunos nutrientes activos como los minerales y la clorofila, que alcanzan hasta un 70% más.
*Raigón Jiménez, M. Dolores (2020). Manual de la Nutrición Ecológica. De la molécula al plato (p. 516-519). València – Espanya, Sociedad Española de Agricultura Ecológica.
Tradicionalmente, las hojas de espinacas se comercializaban en fresco, pero actualmente también hay disponibles opciones congeladas, cocidas (solas o combinadas con garbanzos, por ejemplo) y como parte de hamburguesas, rellenos de empanadas o pasta rellena, entre muchas otras. Las puedes utilizar para elaborar estas opciones o, también, incluirlas frescas en ensaladas, pizzas o bocadillos.
