¿Qué fue primero, el pan o la cerveza? Si nos remontamos a sus antiguos orígenes, ambas preparaciones partían del simple fermento de agua y harina; si la mezcla tenía más harina se convertía en pan y, por el contrario, si sobraba líquido lo que se obtenía era cerveza.
Con el paso de los años, la producción de ambos alimentos se ha ido sofisticando con combinaciones y agregados que agilizan la producción de estos alimentos que han sabido sobrevivir al paso del tiempo.
De ahora en adelante, volverán a formar parte de un proceso recíproco de aprovechamiento: del mismo trigo utilizado por el Obrador Veritas, y sin descuidar la calidad que caracteriza nuestros productos, nace la cerveza Segunda Vida.
La cerveza Ale es de alta fermentación; al ser producida sin aditivos ni conservantes mantiene todas las propiedades nutritivas y organolépticas de una cerveza artesanal.
Por su parte, nuestro pan de calidad y sabor auténticos es elaborado sin atajos químicos: lo hacemos con masa madre, respetando cada tiempo del proceso, siendo un activo altamente beneficioso para la microbiota intestinal.
La cocina de aprovechamiento es algo que nuestras abuelas han pasado hace tiempo pero hoy mismo es una tendencia para cuidar nuestra economía y respetar el medio ambiente. Este concepto, añadido al valor de compartir, se funde en una cerveza que convierte el excedente de pan producto por el Obrador Veritas en una materia prima de altísima calidad para producir una cerveza artesana ale y darle una segunda vida para seguir compartiendo el sabor de lo auténtico.
La circularidad de nuestra labor da vida a un alimento transformando otro sucesivamente, en un proceso altamente respetuoso con el medio ambiente: optimizamos el uso de recursos, conservamos la calidad de la materia prima y reducimos la cantidad de desechos y residuos.