Alimentarte de manera adecuada puede ayudarte a aliviar el dolor de regla. Se trata de hacer pequeños cambios en la dieta con el objetivo de disminuir el dolor y vivir tu ciclo con normalidad.
¿Qué comer para no tener dolor de regla?
La menstruación es un proceso inflamatorio natural: el cuerpo femenino se inflama cuando entra en la fase lútea o premenstrual y se desinflama tras la regla por la acción de los estrógenos. Este incremento de la inflamación puede venir acompañado de incomodidad, pero no de dolor incapacitante. Si este es muy intenso –y no es posible eliminarlo ni con analgésicos– puede que esté avisando de un desequilibrio mayor y debes consultar con el especialista para descartar que no se trate de endometriosis.
De hecho, y aunque la sociedad y los profesionales hayan normalizado las dolencias menstruales, los procesos fisiológicos no suelen cursar con dolor, por lo que es fundamental preguntarse cuál es su origen.
Una semana antes…
Hacer ciertos cambios en tu alimentación puede ayudar a tu organismo a resolver la inflamación y, por tanto, a disminuir el dolor. Una semana antes de la regla debes ser especialmente cuidadosa con la dieta y recordar la importancia de evitar los ultraprocesados, el trigo, la bollería industrial, las chucherías, los embutidos… Paralelamente, es aconsejable aumentar la ingesta de alimentos ricos en omega-3:
Pescado azul
Aguacate
Chía
Lino
Magnesio, el mineral esencial
El magnesio ayuda a disminuir los calambres, cuida la regularidad intestinal y calma el estado mental. Se encuentra en los vegetales de hoja verde, la levadura nutricional, las almendras, los anacardos, el chocolate negro y los huevos.
La cúrcuma destaca por su extraordinaria capacidad antinflamatoria y el hecho de añadirla a tus recetas, tanto fresca como en polvo, puede suponer un antes y un después en tu experiencia menstrual.
