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Flor de Doñana: frutos rojos ecológicos de una tierra única

Ricos, dulces y sabrosos: así son los frutos rojos de Flor de Doñana. La empresa, fundada por Juan María Rodríguez Borrero, ha hecho de la agricultura ecológica su bandera para ofrecer productos de calidad sin dañar el medioambiente. Podrás encontrar sus fresas, arándanos, frambuesas y moras ecológicos en nuestras tiendas apenas un día después de haberlos cosechado en el campo.

Flor de Doñana: frutos rojos ecológicos de una tierra única- compañeros de viaje- Veritas

Hace más de 20 años, Juan María Rodríguez Borrero decidió crear Flor de Doñana Biorganic con la intención de cultivar frutos rojos de manera ecológica. La empresa se sitúa próxima al Parque Nacional de Doñana, un espacio natural protegido considerado la mayor reserva ecológica de Europa. Desde sus inicios, han trabajado incansablemente para conservar su entorno.

“Nuestro propósito es ser lo menos intrusivos posible en el uso de los recursos naturales para llevar a cabo una correcta producción de los frutos rojos”

explica Rodríguez Borrero

A lo largo de los años, la empresa ha obtenido varios reconocimientos, como la certificación B Corp, que avala su compromiso no solo con el medioambiente, sino también con la sociedad. En este sentido, y con un equipo laboral compuesto en su mayoría por mujeres, el proyecto también promueve la igualdad de género y la conciliación laboral y familiar. Su enfoque en crear relaciones laborales justas y equilibradas ha sido un pilar fundamental de su filosofía empresarial.

En Flor de Doñana consideran a la naturaleza su mejor aliada. En este sentido, el entorno agroclimático del Parque Nacional es ideal para los frutos rojos, ya que proporciona el equilibrio ideal entre suelo, agua, temperatura diurna y nocturna, horas de sol… Todo ello apoyado por prácticas de cultivo ecológicas que respetan de manera absoluta el entorno y los tiempos y usos de la naturaleza.

“En nuestros campos no faltan los animales: tenemos burritos, que se alimentan de malas hierbas y cuyo estiércol da lugar a una fertilización más sostenible; mariquitas, las mejores controladoras de plagas; colmenas de abejas para la polinización… Así conseguimos una convivencia entre las plagas del campo, los depredadores y la fauna auxiliar”,

explica Rodríguez Borrero.

Más allá de su enfoque hacia una agricultura ecológica, la clave del éxito de Flor de Doñana radica en la integración de tecnologías innovadoras. Desde esta perspectiva, la empresa utiliza sistemas avanzados de riego y control de humedad para garantizar que sus cultivos reciban solo el agua necesaria para su desarrollo. Este enfoque minimiza el desperdicio de recursos y asegura que la producción se realice de manera eficiente y sostenible.

“El sistema de riego que utilizamos es el sistema por goteo con una tecnología muy característica que implanta unas sondas de humedad para controlar cada gota de agua. De esta forma, cada planta recibe el agua precisa a través de pequeñas gotas, asegurando un uso eficiente de este recurso hídrico y minimizando el desperdicio”, explica.

Gracias a este sistema, Flor de Doñana ha logrado ahorrar hasta un 30% del agua utilizada, contribuyendo a la conservación del suelo y evitando el agotamiento de este recurso tan valioso.

En cuanto al resto de políticas ambientales, la empresa mide la huella de carbono y está en camino de ser una compañía neutra en carbono. Por otro lado, la energía que utilizan procede de placas solares, y como alternativa al plástico optan por envases biodegradables y compostables provenientes de bosques sostenibles certificados.

El proceso de recolección y distribución es otro de los aspectos que diferencia a Flor de Doñana.

“Para asegurar que sean dulces y gustosos, los frutos rojos deben madurar en la planta y nunca recolectarse antes de tiempo, por eso vamos al campo cada día a recoger los mejores frutos y, después de envasarlos, los enviamos a Veritas en menos de 24 horas”, comenta Rodríguez Borrero.

Este compromiso con la frescura garantiza que las fresas, moras, arándanos y frambuesas lleguen a nuestros supermercados conservando todo su sabor y propiedades organolépticas.

Por otro lado, Flor de Doñana se asegura de que cada paso del proceso, desde la cosecha hasta el envío, tenga el aval de certificaciones ecológicas que garantizan la calidad y la autenticidad del producto. Gracias a su dedicación, puedes disfrutar de unos frutos rojos frescos, naturales y llenos de sabor.

Los frutos rojos contienen antioxidantes, como las antocianinas, flavonoides, vitamina C y vitamina E, que ayudan a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y neurodegenerativas, fortalecen el sistema inmunológico y promueven una piel sana. Además, son ricos en minerales y fitonutrientes, lo que los convierte en una opción saludable y nutritiva.

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