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5 alimentos que ayudan a restaurar la permeabilidad intestinal

El sistema digestivo es uno de nuestros pilares fundamentales, y en él, la permeabilidad intestinal juega un gran papel. Recientemente, se ha hablado mucho sobre el “intestino permeable” o leaky gut, un trastorno que puede desencadenar desde disfunciones digestivas hasta alteraciones en el sistema inmunológico. La buena noticia es que es reversible: la medicina integrativa ofrece soluciones naturales para restaurar la salud del intestino.

La pared intestinal está formada por células unidas que actúan como barrera. Si se debilitan, toxinas y microbios pueden pasar al torrente sanguíneo, lo que desencadena una respuesta inflamatoria que afecta a todo el cuerpo. Afortunadamente, una alimentación adecuada puede fortalecer esa barrera y devolver el equilibrio al organismo.

1. Caldo de huesos: un remedio ancestral para el intestino

Es uno de los alimentos más recomendados por la medicina integrativa para restaurar la salud intestinal. Este elixir, utilizado en todo el mundo durante miles de años, es fuente de colágeno, gelatina y aminoácidos como la glicina, que ayudan a reparar las paredes intestinales dañadas.

Además, aporta minerales como el calcio y el magnesio, esenciales para absorber bien los nutrientes. Sus propiedades antiinflamatorias también calman el intestino y reducen el impacto del estrés digestivo.

2. Probióticos: el poder de los microorganismos beneficiosos

Los probióticos son bacterias beneficiosas que viven en nuestro intestino y son fundamentales para mantener la microbiota intestinal en equilibrio. Incluir alimentos fermentados como el kéfir, el chucrut o el miso en la dieta puede ayudar a restaurar la permeabilidad intestinal.

Estos alimentos contienen microorganismos que contribuyen a equilibrar la microbiota intestinal, apoyan la función inmune y reducen la inflamación del intestino.

3. Aceite de coco: el restaurador intestinal

Este es otro alimento que se recomienda para reparar el intestino. Su contenido en ácidos grasos de cadena media (MCT, por sus siglas en inglés) tiene propiedades antiinflamatorias que ayudan a reducir la irritación y la inflamación en el tracto digestivo.

Además, posee propiedades antimicrobianas, lo que significa que puede ayudar a controlar el crecimiento de microorganismos patógenos en el intestino y favorecer las bacterias beneficiosas. Puedes incluirlo en la dieta como grasa saludable, en preparaciones culinarias o incluso en ayunas, como remedio casero.

4. Frutas y verduras ricas en fibra

El consumo de frutas y verduras es esencial para mantener un intestino sano. La fibra no solo ayuda a regular el tránsito intestinal, también alimenta a las bacterias beneficiosas del intestino, favoreciendo el equilibrio de la microbiota.

El aguacate, la zanahoria, las espinacas o los arándanos son ricos en fibra soluble e insoluble que contribuyen a la restauración de la salud intestinal. La fibra actúa como un cepillo natural que limpia las paredes del intestino, eliminando residuos y toxinas.

5. Cúrcuma: el antiinflamatorio natural

La cúrcuma, gracias a la curcumina, es uno de los antiinflamatorios naturales más poderosos que hay para nuestra dieta. Esta especia, un pilar en la medicina tradicional india, tiene la capacidad de reducir la inflamación en todo el cuerpo, incluida la del intestino. Es ideal para añadir en sopas, guisos, batidos o infusiones y disfrutar de sus beneficios.

Xavi Cañellas, fundador de Regenera y divulgador científico especializado en la relación entre la mente, el sistema inmunológico y la microbiota intestinal.

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